Desapariciones forzadas en Morelos, en aumento desde 2013

Por Arturo León Hidalgo

CUERNAVACA, Morelos.- En el estado de Morelos, durante la administración de Graco Ramírez han sido desaparecidos 50 hombres y 42 mujeres en diferentes circunstancias, desde 2013 a la fecha, aseguró José Martínez Cruz representante de la Comisión Independiente de Derechos Humanos en el estado, y agregó que en el caso de las mujeres, la mayoría de las víctimas son jóvenes de 16 a 27 años de edad.

El director de la Comisión explicó que las zonas donde más existen las desapariciones son Cuernavaca, Jiutepec, Zapata y Temixco. “Es donde se concentra el mayor número de desapariciones y deben de tomarse las medidas preventivas adecuadas; en este gobierno, ha aumentado las desapariciones forzadas”, explicó el funcionario de derechos humanos, y especificó que la identificación de una desaparición forzada es cuando interviene una autoridad del Estado de cualquier nivel.

“La mayoría de las desapariciones se mantiene en la impunidad. ¿Qué tenemos qué hacer? Crear instrumentos legales, tomar conciencia de la gravedad y exigir políticas públicas de respeto a los derechos humanos, son tareas indispensables para que detener las desapariciones”, apuntó José Martínez.

El funcionario explicó que las fotos de desaparecidos son pegadas a las bardas y paredes que dan a las calles la ciudad, y son colocadas por los familiares de las víctimas, además de que en muchos casos no denuncian la desaparición de su pariente por miedo, sobre todo si se sospecha que intervino una autoridad.

De acuerdo a la información del portal de la Comisión Independiente de Derechos Humanos especifica que "en el gobierno de Calderón y el actual de Peña Nieto, se dispararon las cifras de personas desaparecidas en todo el país, bajo la estrategia política de una guerra supuestamente contra el narcotráfico, confiriendo poderes extraordinarios a las corporaciones policiacas y de las fuerzas armadas".

En Morelos, históricamente, recordó José Martínez, la desaparición forzada es una medida de represión gubernamental que se impuso en los años setenta. Por último, enfatizó la necesitad de trabajar todas las instancias de derechos humanos en este grave problema, ya que la desaparición forzada es un crimen de lesa humanidad que urge ser erradicado en México.